La preservación del medio ambiente y el compromiso con la sostenibilidad son objetivos que se han vuelto relevantes recientemente en empresas de distintos sectores. Lo mismo ha ocurrido en la industria dedicada a la logística, en la que una de las principales estrategias para hacer un uso más responsable de los recursos es la utilización de embalaje ecológico que tiene un impacto positivo en el entorno. 

Es así como esta tendencia comienza a cobrar fuerza en los clientes que prefieren optar por marcas que comercializan sus productos con un embalaje más sostenible, por lo que es imprescindible que las empresas de esta industria conozcan más acerca de este tema.

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¿En qué consiste el embalaje ecológico?

El embalaje es el encargado de almacenar un conjunto de unidades del mismo producto, con el objetivo de proteger la mercancía de golpes y caídas, así como de cualquier otro posible daño externo. Con esta definición, podemos destacar que es una de las partes fundamentales dentro de la logística, puesto que es gracias a esto que los productos llegan en óptimas condiciones. 

Ahora bien, para que éste se considere dentro de la categoría de sustentable, debe contar con ciertas características importantes, de las que resaltan:

• Menor uso de materiales. Se debe utilizar solamente el embalaje necesario, ya que cuantos menos elementos se utilicen, mejor. Además, aquellos materiales que son imprescindibles deben estar hechos de materias primas sustentables.

• Evitar el plástico. Uno de los principales objetivos de los embalajes ecológicos es lograr la reducción del plástico que resulta altamente contaminante, por lo que es necesario sustituirlo por otro tipo de materiales.

• Ciclo de vida sostenible. Todo el proceso del embalaje debe ser sostenible, es decir, desde su fabricación hasta su transporte y posterior reciclado o reutilización debe tener una huella ambiental baja. Los productos químicos propician la contaminación de la atmósfera, por lo que es imprescindible evitarlos en cualquier etapa.

• Biodegradable. En caso de que no puedan reciclarse o reutilizarse, lo recomendable es que los embalajes sean biodegradables para que logren desintegrarse con facilidad y aporten nutrientes al medio natural en el que se encuentran.

Ejemplos de materiales sostenibles

Por materiales sostenibles para embalaje ecológico nos referimos a recursos con modelos de producción eficientes, de productos reciclables y reutilizables y que intentan minimizar la huella en el medioambiente. Asimismo, éstos ofrecen alternativas para evitar utilizar el plástico, que, como hemos mencionado, resulta altamente contaminante. 

En primer lugar, el cartón es uno de los materiales más utilizados con este propósito, ya que es sostenible y económico por su fácil reutilización y su bajo impacto ambiental, ya que una caja de este tipo es biodegradable en más del 80%. Si bien el cartón puede tener un ciclo de vida corto ya que es propenso a dañarse, existen ciertos tipos de éste que resultan ideales para los embalajes, como lo es el cartón corrugado que es compacto y puede soportar grandes cantidades de peso.

Por otra parte, los bioplásticos o plásticos vegetales son materiales resistentes y 100% biodegradables que cada vez están tomando más relevancia, no sólo en la industria de la logística sino también en la agrícola, la textil, entre otras. Provienen de materias naturales como la soja, el maíz o la fécula de papa y su desarrollo es producto de la necesidad de encontrar un material con características similares al plástico que provenga de fuentes renovables. 

Los embalajes de papel kraft también son una alternativa más ecológica, ya que existen multitud de formatos y acabados con este material, desde bolsas hasta cajas plegables de todo tipo y tamaño. Son fáciles de adquirir, por lo que muchas empresas optan por este tipo de material para realizar sus envíos, además de que aportan un ligero impacto en el medio ambiente.

Cada vez son más los elementos naturales que se utilizan para embalajes, de los que también podemos destacar el papel encerado, la caña, pulpa de trigo o la hoja de palma.

¿Cuáles son los beneficios de este tipo de embalajes?

Como se ha mencionado, en los últimos años se han desarrollado diversos materiales para embalaje ecológico, lo que facilita su comercialización. El uso de éstos trae beneficios no solamente para el cuidado medioambiental, sino también para las empresas, dentro de los que podemos destacar:

• Sostenibilidad. El uso de materiales respetuosos con el medio ambiente supone un beneficio generalizado que mejora la calidad de vida de la población en el mundo entero.

• Valor emocional. Este tipo de productos ecológicos aportan un valor emocional al usuario final, ya que lo hace sentir partícipe de la responsabilidad y compromiso con el medio ambiente que también tiene la empresa. Además, esta situación puede atraer a posibles clientes que se interesan por generar una menor huella contaminante.

• Mayor ahorro. Si bien en un primer momento se debe realizar una gran inversión para probar los nuevos materiales, lo cierto es que, a mediano y largo plazo, esto trae beneficios económicos para la empresa. La razón de esto es que hay un menor consumo de materiales y, adicionalmente, muchos de ellos pueden reutilizarse ya sea para el mismo fin o para otro diferente.

• Certificaciones. Decantarse por el uso de materias primas de origen sostenible o de productos reciclados es merecedor de distintos sellos ecológicos que son reconocidos a nivel internacional. Esto le agrega valor a la empresa y le brinda un factor diferencial respecto a la competencia.

A modo de conclusión, podemos mencionar que el embalaje ecológico trae diversos beneficios tanto para la empresa como para el cuidado medioambiental, además de que actualmente existen diversas opciones de materiales para este fin. 

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Fuentes: Rajapack