El seguro de mercancía tiene la función de cubrir los riesgos y daños ocasionados a la carga durante su transportación, manipulación y almacenamiento. Existen diferentes coberturas dentro del seguro que se adecuan a distintas necesidades dependiendo sea el caso que el cliente requiera. Sin embargo, es importante conocer los términos y condiciones del seguro que estamos contratando para cerciorarnos que efectivamente estás cubriendo el riesgo del que te interesa proteger tu mercancía.

En muchas ocasiones, al momento de leer estos términos y condiciones, los diferentes conceptos y tecnicismos que nos encontramos pueden ser confusos o no estar claros. Y es que dentro del seguro de mercancía existe toda una terminología que es importante conocer y entender cómo contratante para estar seguro de que lo que estás pagando realmente es de tu interés y te funcionará en caso de algún siniestro.

Es por eso que te compartimos las siguientes definiciones más importantes por conocer al momento de contratar un seguro de mercancía.

Seguro de mercancía y su terminología.

Para comenzar, hay que entender que es el seguro de mercancía. Este concepto principalmente es importante desmenuzarlo para comprender primero qué es un seguro. Un seguro se puede definir como una herramienta financiera por la cual la persona interesada en protegerse o proteger sus bienes realiza un contrato (denominado póliza) en el cual paga cierta cantidad a la aseguradora o el agente de seguros para de esta manera resguardar y disminuir la incertidumbre económica que ocasiona un siniestro.

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Al contratar un seguro de mercancía, el interesado está reduciendo el riesgo de sufrir pérdidas económicas en el caso de que su carga sea robada, dañada, perdida o incluso destruida durante el proceso de importación o exportación. Esto debido a que en caso de sufrir un percance que pueda ser cubierto de acuerdo a los términos y condiciones acordados, la asegurada tendrá que cubrir los gastos acordados en el contrato o póliza por el cliente.

Los escenarios en los que el riesgo se presenta durante la cadena de suministros son incontables, es por eso que las personas interesadas en contratar un seguro de mercancía deben de conocer las posibles amenazas específicas de su carga y buscar un seguro que se adecue a resguardarla.

Por ejemplo, las amenazas no son las mismas para los riesgos de la carga refrigerada como lo son para el transporte de ropa, calzado o dispositivos electrónicos, que, aunque ambos casos son altamente sensibles al robo, también existen coberturas específicas para la etiqueta y envase de los productos o para la posibilidad de daños por fallas en el sistema de ventilación en el contenedor reefer.

Póliza Específica.

La póliza específica o sencilla de un seguro de mercancía es un contrato en el cual se formaliza la contratación del seguro para el viaje o transportación de carga que el cliente especifique. Para estos casos, el cliente debe saber previamente las características y detalles de la carga, así como el medio de transporte que se utilizará.

Para tener cobertura, el asegurado debe solicitar esta póliza antes de haber comenzado a correr el riesgo correspondiente, es decir antes de que la mercancía inicie el viaje.

La vigencia de esta póliza es únicamente durante el tiempo que dure el viaje, es decir hasta que la mercancía sea entregada al destino final acordado.

Póliza Global:

Conocida también como póliza de bloque, esta póliza se extiende para todos los embarques de importación, exportación y/ o tránsitos locales a la vez que considera un modal, como puede ser terrestre, marítimo o aéreo, en un periodo de tiempo pactado con anterioridad bajo una prima de riesgo fija.

Prima:

Costo del seguro o aportación económica que ha de pagar un asegurado o contratante a la compañía aseguradora por la transferencia del riesgo.

Deducible:

Participación del asegurado, mediante el pago o deducción de un importe o cantidad pactada con la aseguradora, en caso de una pérdida o daño sufrido durante un siniestro. Los porcentajes de este están establecidos con base en la probabilidad de que un siniestro ocurra.

Cobertura:

Es un término que se refiere a lo que la compañía aseguradora está cubriendo en caso de que se presente un siniestro y como consecuencia de ello, está la eventualidad prevista en el contrato.

Deber humano:

Los artículos 58, fracción II y 80 de la Ley Sobre el Contrato de Seguros establecen la obligación de la empresa aseguradora de responder en términos del contrato, siempre y cuando el siniestro se cause en cumplimiento a un deber humano. Por ejemplo, cuando se evite un incendio o una colisión y esto produzca otro tipo de daños, los gastos efectuados por el asegurado para evitar dicho siniestro quedarán cubiertos por la Ley.

Exclusión de riesgo:

Decisión tomada por la compañía aseguradora en virtud de la cual no quedan cubiertos ciertos riesgos en la póliza. La Ley Sobre el Contrato de Seguros en su artículo 59 señala que el contrato o póliza debe expresar y describir de forma clara los acontecimientos excluidos.

Endoso:

Es una declaración puesta en el contrato o póliza de seguro por la cual su tenedor legitima a otra persona, denominada endosatario en el ejercicio de los derechos incorporados a dicha póliza. El endoso se considera una modificación al contrato del seguro y por tanto se debe tener en consideración los artículos 24 y 25 de la Ley Sobre el Contrato de Seguros.

Interés asegurable:

 Es la relación monetaria que existe entre una persona y las mercancías a asegurar. Representa el deseo sincero y honesto que una persona física o moral tiene de que un siniestro no se produzca, ya que en consecuencia se produciría un perjuicio para su patrimonio.

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