Las autopistas y casetas de peaje en México representan un eje clave para el desarrollo económico y social del país, ya que facilitan el transporte de mercancías, impulsan el turismo y conectan a las comunidades con centros urbanos y comerciales. Esta infraestructura vial permite mejorar la movilidad y fortalecer la economía regional al reducir los tiempos de traslado y mejorar la seguridad en los viajes. Sin embargo, algunos de estos puntos también se encuentran entre las carreteras más caras de América Latina. Estos altos costos, aunque destinados a cubrir el mantenimiento y mejora de las vías, generan un impacto significativo en la movilidad de los usuarios, especialmente en transportistas y turistas.
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Las carreteras más caras en México
En México hay un total de 137 casetas de peaje operadas por Caminos y Puentes Federales (CAPUFE) y sus precios determinan cuáles son las carreteras más caras a nivel nacional, las cuales son las siguientes:
- Carretera Tepic-Mazatlán
Esta carretera es frecuentemente utilizada por turistas que visitan Mazatlán, especialmente durante eventos como el Festival de la Moto y el Carnaval de Mazatlán, así como para presenciar fenómenos naturales, como el eclipse solar de 2024.
Las tarifas para esta caseta son:
- Motocicleta: 574 pesos
- Automóvil: 1,150 pesos
- Camión 7, 8 y 9 ejes: 4,105 pesos
El elevado costo de esta caseta ha llevado a cuestionar la relación entre las concesionarias y el gobierno en la fijación de tarifas. A pesar de las críticas, su ubicación estratégica y la cantidad de eventos que atraen visitantes a la región la convierten en una de las más transitadas del país.
- Maravatío-Zapotlanejo
La autopista que conecta Maravatío con Zapotlanejo es crucial para quienes transitan entre el centro y el occidente del país, así como es vital para el comercio y el transporte de mercancías y para el turismo hacia Guadalajara y sus alrededores.
Las tarifas de esta carretera son:
- Motocicleta: 362 pesos
- Automóvil: 726 pesos
- Camión 7, 8 y 9 ejes: 2,181 pesos
La carretera Maravatío-Zapotlanejo es una arteria fundamental para el comercio en la región, por lo que los altos costos impactan directamente en los precios de los productos transportados.
- Guadalajara-Tepic
La vía que conecta Guadalajara con Tepic es otra de las carreteras más caras del país. Esta ruta es utilizada tanto por transportistas como por turistas que se dirigen a la Riviera Nayarit y otros destinos costeros.
- Las tarifas de esta caseta son:
- Motocicleta: 325 pesos
- Automóvil: 651 pesos
- Camión 7, 8 y 9 ejes: 1,356 pesos
A pesar de las críticas por sus tarifas, esta carretera es clave para el desarrollo turístico y económico del occidente de México. La carretera también es conocida por sus paisajes pintorescos, lo que la hace atractiva para los viajeros.
- Caseta Mérida-Cancún
Esta es una de las carreteras más caras de México, la cual conecta Mérida con Cancún y resulta fundamental para el turismo en la Península de Yucatán. Esta carretera es una de las más transitadas por turistas nacionales e internacionales que visitan los destinos turísticos de Cancún, Playa del Carmen y Tulum.
Las tarifas de esta carretera son las siguientes:
- Motocicleta: 303 pesos
- Automóvil: 608 pesos
- Camión 7, 8 y 9 ejes: 3,350 pesos
- Caseta Cuernavaca-Acapulco
La carretera que conecta Cuernavaca con Acapulco es una de las más utilizadas por los turistas que visitan las playas de Guerrero. Esta carretera es una de las más importantes del sur de México y es clave para el turismo en Acapulco, uno de los destinos más emblemáticos del país.
Las tarifas de esta caseta son:
- Motocicleta: 301 pesos
- Automóvil: 603 pesos
- Camión 7, 8 y 9 ejes: 978 pesos
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Comparativa internacional
Según datos oficiales, México es el país con las carreteras más caras en América Latina. Por ejemplo, la caseta de Acaponeta, en la ruta Tepic-Mazatlán, tiene una tarifa de 470 pesos para vehículos normales, lo que la convierte en la caseta más costosa de Latinoamérica. En comparación, la caseta de Antioquia en Colombia tiene un costo de 99.36 pesos mexicanos por automóvil.
Esta disparidad refleja diferencias en la infraestructura vial y los costos de mantenimiento entre los países. Mientras que en algunos países de América Latina las tarifas de peaje están estandarizadas, en México varían significativamente según la concesionaria y la región.
Esta situación en México afecta tanto a los turistas como a los transportistas. Para los viajeros, esto implica planificar con mayor detalle sus rutas y presupuestos, tomando en cuenta los costos adicionales de peaje. Para los transportistas, los elevados costos pueden representar un obstáculo para la competitividad, ya que incrementan los costos de operación y, en consecuencia, los precios de los productos que transportan.
En conclusión, si bien los ingresos por peaje son esenciales para el mantenimiento de las vías, los conductores y transportistas mexicanos enfrentan una carga económica significativa por las carreteras más caras del país que impacta su movilidad y sus finanzas. Ante esta realidad, es fundamental que los usuarios de las carreteras planifiquen sus viajes y evalúen las mejores rutas disponibles para optimizar costos y garantizar una experiencia de manejo más económica y eficiente.
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Fuente: Infobae