En la logística a nivel mundial se suman, con el paso de los años, cada vez más innovaciones y nuevas estrategias son implementadas para mejorar la productividad y las operaciones dentro de la cadena de suministro, además de la eficiencia de cada eslabón en las actividades logísticas, y una de esas recientes invenciones es la logística sostenible (conocida también como logística verde o sustentable).
Esta reciente estrategia logística se agrega al catálogo de los planes de acción de la industria que están enfocados en generar conciencia y aminorar el impacto medioambiental que estas operaciones dejan a su paso directa o indirectamente, sumándose a estrategias como la logística inversa, por ejemplo.
Y es que, de acuerdo con diferentes estudios, se prevé que entre 2013 y 2030 la industria transportista representará el 97% del aumento en el consumo de petróleo a nivel global, lo que vuelve urgente e indispensable la implementación de medidas enfocadas en disminuir el impacto al medioambiente.
Por lo anterior, en la Agenda 2030 se han trazado una serie de objetivos con los que se esperan cumplir, entre ellos, reducir las emisiones por CO2 en un 30% y los costos de entrega en un 25% a través de la logística sustentable.
Logística inversa: ¿qué es y cuáles son sus características?
¿Qué es la logística sostenible?
La logística sostenible o verde es la estrategia con la cual se llevan a cabo prácticas y se implementan políticas sustentables para disminuir el impacto dañino al medio ambiente.
A través de estas medidas, se pretenden implementar, cambiar o adaptar algunas de las operaciones dentro de la cadena de suministro para así lograr tener procesos más respetuosos con el medio ambiente, teniendo en cuenta un equilibrio entre lo ecológico y la economía de las empresas.
No obstante, la logística verde va más allá del uso de vehículos ecológicos para el transporte y así reducir las emisiones. Además de eso, las prácticas también involucran la implementación de softwares de optimización de rutas, así como de entregas.
Por otro lado, otra de las políticas de sustentabilidad se enfoca en el uso responsable de recursos, por ejemplo, el reciclaje de cartones, cajas o materiales de empaque y embalaje. También, la eliminación adecuada de los desechos u otra clase de residuos.
Para lograr lo anterior, es necesario que las empresas realicen un análisis de cada una de las áreas que implican actividades logísticas para así determinar el impacto medioambiental que se causa y a partir de eso establecer las estrategias de sostenibilidad.
Las ventajas de la logística sostenible.
Además de los beneficios ya conocidos, como el ahorro de costos y la mejora de la imagen empresarial, el uso de estrategias de logística sustentable tiene un impacto mayor que pueden convertirse en ventajas que lleven a una transformación a nivel industria, siempre y cuando se apliquen las acciones adecuadas.
- Nuevos planes de comunicación
A través de diferentes plataformas y predicando con el ejemplo, las industrias serán cada vez más capaces de transmitir mensajes de concientización que ayuden a un cambio en el pensamiento y la forma de ser sostenible.
- Menos plástico
Tal vez el principal y más grande reto de las empresas es dejar de utilizar plástico; sin embargo, algunas compañías y países comienzan a tomar con más seriedad este tema.
- Transporte ecológico
Otra de las ventajas de las estrategias de sostenibilidad es la utilización de vehículos ecológicos. Con estos, se lograrán disminuir las emisiones de CO2.
Logística verde como parte de la agenda 2030.
Ante un escenario mundial de sensibilización y concientización acerca del cuidado de la naturaleza y el medio ambiente (y la urgente necesidad de conseguirlo), los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) incluidos en la Agenda 2030 han alcanzado al sector logístico y supply chain.
Cabe resaltar que, debido al creciente comercio electrónico y a la necesidad de las entregas, el Foro Económico Mundial ha resaltado que esta alta demanda generará un 36% más de vehículos en las ciudades para el año 2030, lo que se traduce como una emergencia mayor al enfrentar dos diferentes necesidades, y, a la vez, dificultades: el apuro por más vehículos para el transporte de mercancías y la urgencia de poner en marcha políticas y medidas de sostenibilidad.
Para lograr la reducción de las emisiones, el Parlamento Europeo ha sentado las bases con políticas de desarrollo sostenible, pues a finales de 2019 catalogó los asuntos medioambientales como urgentes y se comprometió con la reducción de las emisiones de gases en un 55% para el 2030 en territorio europeo.
La logística sostenible es una de las estrategias que deben comenzar a ponerse en marcha, ya que los daños medioambientales cada vez crecen más, por lo que la implementación de medidas eco amigables resulta urgente.
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Fuentes: BBVA, C Logística.