Año con año, ocurren una serie de incidentes marítimos que tienen graves consecuencias tanto para la industria del transporte marítimo como para las comunidades cercanas a estos accidentes. En 2024 esto no fue la excepción, por lo que se suscitaron diversas situaciones que provocaron desde colisiones catastróficas hasta hundimientos y derrames de petróleo, los cuales evidenciaron la importancia de contar con protocolos de seguridad para proteger a todas las partes involucradas en este sector.
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Los 5 peores incidentes marítimos del 2024
- Colisión del Buque Dali en Baltimore, Estados Unidos
El 26 de marzo de 2024, la ciudad de Baltimore fue escenario de uno de los incidentes marítimos más catastróficos del año cuando el buque portacontenedores Dali chocó contra el puente Francis Scott Key. El impacto provocó el colapso parcial del puente, lo que a su vez provocó la caída de varios vehículos al río Patapsco.
El Dali, con una eslora de 300 metros y capacidad para transportar un aproximado de 10 mil contenedores, había zarpado hacia Sri Lanka. Sin embargo, la embarcación experimentó apagones eléctricos unas 10 horas antes de zarpar del puerto de Baltimore y una vez más poco antes de estrellarse, lo que provocó que perdiera el control y se dirigiera directamente hacia uno de los pilares del puente.
La operación de rescate involucró a la Guardia Costera y los bomberos de Baltimore. Dos personas fueron rescatadas con vida, mientras que seis trabajadores desaparecieron y posteriormente fueron dados por muertos.
Las autoridades locales declararon estado de emergencia y la empresa propietaria del Dali, Synergy Group, inició una cooperación con las investigaciones federales. Asimismo, al presentarse daños estructurales en el puente, este puerto estuvo cerrado durante varios meses, lo que dio como resultado una pérdida económica de 15 millones de dólares diarios, según estimaciones.
- Derrame de petróleo en el estrecho de Kerch
El 15 de diciembre de 2024, dos petroleros rusos, Volgoneft-212 y Volgoneft-239, fueron golpeados por una tormenta en el estrecho de Kerch. El primero, que transportaba 4 mil 300 toneladas de fueloil, se partió por la mitad, lo que provocó un derrame masivo de petróleo en la región.
La tormenta, con vientos de hasta 38 millas por hora, dañó también a la segunda embarcación, que quedó a la deriva antes de encallar cerca del puerto de Taman, en Krasnodar. A pesar de los esfuerzos de rescate, uno de los tripulantes del Volgoneft-212 perdió la vida.
El derrame de petróleo en el estrecho de Kerch generó una crisis ambiental, afectando la fauna marina y las comunidades costeras. La limpieza del derrame ha sido compleja debido a las condiciones climáticas adversas y las corrientes marinas en la zona.
Este incidente resaltó la vulnerabilidad de las rutas marítimas del Mar Negro ante condiciones climáticas extremas y la necesidad de implementar mayores controles de seguridad en los buques petroleros.
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- Ataque al MV Rubymar en el Mar Rojo
El 18 de febrero de 2024, el buque de carga Rubymar fue alcanzado por un misil antibuque lanzado por las fuerzas hutíes en el contexto de la crisis del Mar Rojo. Dicho ataque dejó al buque a la deriva durante semanas hasta que finalmente se hundió el 2 de marzo.
El Rubymar, un granelero de tamaño Handymax con bandera de Belice, transportaba fertilizante desde los Emiratos Árabes Unidos hacia Bulgaria. Tras el impacto del misil, los 24 tripulantes fueron rescatados por el buque Lobivia y llevados a Yibuti.
El hundimiento del Rubymar generó un desastre ambiental debido al derrame de petróleo y a la posible proliferación de algas causada por la carga de fertilizante; asimismo, se reportaron interrupciones en el tráfico de Internet debido a daños en cables submarinos.
Este ataque fue uno de los primeros incidentes marítimos de este tipo en hundir un buque en el Mar Rojo, y evidenció los riesgos crecientes para la navegación en esta región debido al conflicto en Yemen.
- Hundimiento del Ursa Major en el Mediterráneo
El 22 de diciembre de 2024, el buque de carga pesada Ursa Major, bajo bandera rusa, sufrió una explosión en su sala de máquinas mientras navegaba entre España y Argelia. El buque, que transportaba escotillas y grúas móviles, se hundió durante la noche del 23 al 24 de diciembre.
De los 16 tripulantes a bordo, 14 fueron rescatados por buques españoles y desembarcados en Cartagena; lamentablemente, dos tripulantes desaparecieron y se presume que murieron.
El hundimiento del Ursa Major fue descrito por algunos medios rusos como un acto de terrorismo, aunque las causas reales aún están bajo investigación. El incidente subrayó la importancia de la seguridad en la navegación por el Mediterráneo y la necesidad de protocolos de respuesta rápida ante emergencias en alta mar.
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- Naufragio del Argos Georgias en la Antártida
El 22 de julio de 2024, el buque pesquero Argos Georgias, con bandera de la Isla de Santa Helena, lanzó un llamado de auxilio tras sufrir una vía de agua, es decir, una entrada de agua a través del casco, durante una tormenta en la zona del Tratado de la Antártida (CCAMLR).
El pesquero chileno Puerto Toro acudió al rescate, junto con otros buques de la región, incluidos helicópteros y aviones militares. La tripulación del Argos Georgias evacuó en balsas salvavidas, y los equipos de rescate lograron salvar a 14 personas.
Sin embargo, el saldo final fue trágico: cinco tripulantes fallecidos y ocho desaparecidos. Las condiciones climáticas adversas dificultaron las labores de rescate y recuperación.
El naufragio del Argos Georgias puso en evidencia los riesgos a los que están sujetos los incidentes marítimos suscitados en zonas remotas y peligrosas como la Antártida. Además, evidenció la importancia de contar con protocolos de seguridad y rescate adecuados para evitar tragedias mayores en estas aguas desafiantes.
En conclusión, los incidentes marítimos de 2024 se dieron como consecuencia de la navegación por rutas peligrosas, las condiciones climáticas extremas y los conflictos regionales, los cuales continúan siendo desafíos constantes para la industria marítima. Aprender de estos incidentes es fundamental para evitar tragedias similares en el futuro y proteger tanto a los trabajadores marítimos como al medio ambiente.
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