Recientemente, se anunció que la compañía estadounidense Tesla, la cual diseña, fabrica y vende automóviles eléctricos, construirá una nueva planta en el municipio de Santa Catarina, Nuevo León. Con una inversión inicial de cinco mil millones de dólares (que podría duplicarse en un futuro), la llegada de esta empresa ha abierto nuevamente el debate sobre los beneficios y las desventajas del nearshoring en México. Si bien se espera que este nuevo proyecto genere entre cinco mil y seis mil puestos de trabajo, lo cierto es que la nación mexicana aún cuenta con muchos retos por delante antes de convertirse en uno de los puntos más importantes de mano de obra a nivel mundial a través del nearshoring.
¿Por qué es tan atractivo el nearshoring en México?
Pese a que la llegada de Tesla a México causó un gran revuelo a nivel nacional, lo cierto es que no es la primera empresa extranjera que ha decidido construir sus plantas en el país en el 2023, puesto que, a principios del año, 28 compañías de China comenzaron a invertir miles de millones de dólares en el Parque Industrial “Hofusan”, en donde se construirán decenas de fábricas chinas.
La principal razón por la que el nearshoring en México resulta tan atractivo para otros países es porque la mano de obra es más barata en esta nación. Según un estudio realizado por The Boston Consulting Group (BCG), las empresas mexicanas gastan en promedio 372 dólares mensuales por la mano de obra, mientras que en China gastan 389 dólares. Además, se estima que en México se trabaja un 12% más que en otros países del mundo, con un total de 48 horas a la semana, lo que significa un aumento en la productividad.
Asimismo, el Banco Mundial señala que “las tensiones geopolíticas y las complicaciones logísticas derivadas de la pandemia de Covid-19 despertaron el interés de alcanzar una mayor diversificación de la producción en lugares geográficamente más cercanos”. Esto, aunado al hecho de que México cuenta con un mercado con mucho potencial de consumo, ha beneficiado a que las empresas de países geográficamente cercano se sientan atraídas en construir plantas en este país.
Por todo lo anterior, esta tendencia ha alcanzado a las grandes industrias de diversos sectores, como el manufacturero, tecnológico, de la salud, aeroespacial y, sobre todo, el automotriz. La llegada de Tesla al país sólo puso en evidencia una situación que venía dándose desde hace un año: el auge del nearshoring en México es una gran oportunidad para el crecimiento de su economía.
¿A qué retos se enfrenta?
Como se ha mencionado, esta práctica trae beneficios para todos los países involucrados, puesto que permite una reducción considerable de los costos logísticos de las empresas extranjeras y una mayor ganancia económica para la nación que recibe a estas compañías. No obstante, para aprovechar al máximo el nearshoring en México, el gobierno aún debe trabajar en diversas estrategias para otorgar mejores condiciones a las empresas que deseen instalar sus plantas en el país.
Según señala Jorge León Orantes, CEO de la firma legal Santamarina y Steta, uno de los retos pendientes de la nación mexicana frente a esta práctica es la mejora de su infraestructura eléctrica, puesto que deben considerarse nuevas fuentes de energía renovable para evitar un impacto nocivo en el medio ambiente. De igual manera, la logística es también un punto importante a mejorar, ya que un análisis del Banco Mundial califica a este sector con un índice de 3 en una escala de 5, por lo que su infraestructura podría ser insuficiente.
Por otra parte, ante el incremento en la demanda de espacios mobiliarios industriales derivado del nearshoring en México, la Asociación Mexicana de Profesionales Inmobiliarios (AMPI) indicó que quedan pocos espacios disponibles para rentar en los principales parques industriales de México. Por esta razón, deben desarrollarse soluciones para este punto, sobre todo en los estados de la frontera norte, que son los que tienen un mayor territorio para albergar a las empresas extranjeras interesadas.
Por último, uno de los problemas más graves para el desarrollo de esta práctica es el desabasto de agua en Nuevo León, lo que podría obstaculizar el arribo de la planta armadora automotriz de Tesla. Pese a esto, José María Garza Treviño, presidente del Grupo Garza Ponce, afirma que las empresas que llegan hasta este estado son conscientes de estos temas medio ambientales, por lo que toman medidas estratégicas para utilizar lo menos posible este líquido. Sin embargo, con un 82% del territorio nacional enfrentando un estrés hídrico, este es un tema de especial relevancia al que se le deben encontrar soluciones adecuadas para evitar que la situación se agrave.
Pese a los retos que enfrenta el nearshoring en México, se estima que un 75% de los mexicanos considera como positiva la llegada de Tesla a México debido a que se estima que esta práctica podría incrementar en un 8% el Producto Interno Bruto (PIB) en los próximos seis años.
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Fuentes: Milenio
