En el mundo del comercio internacional, existen varios mecanismos diseñados para fomentar la colaboración entre países y promover el desarrollo económico. Uno de estos instrumentos es el Registro de Exportadores (REX), también conocido como sistema REX, una herramienta crucial dentro del Sistema de Preferencias Generalizadas (SPG) de la Unión Europea.
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¿Qué es el sistema REX?
El sistema REX fue implementado el 1 de enero de 2017 con la intención de permitir a los exportadores de países en desarrollo a acceder a aranceles preferenciales al enviar sus productos a la Unión Europea. Antes de su creación, el proceso de certificación de origen estaba sujeto a la obtención de certificados emitidos por autoridades gubernamentales. Sin embargo, este nuevo sistema introdujo un enfoque más ágil al permitir que los propios exportadores se registraran y emitieran sus declaraciones de origen.
En términos más sencillos, el REX es una plataforma que permite a los exportadores asumir un papel más activo en la certificación de origen de sus productos, lo que elimina la necesidad de depender exclusivamente de los certificados emitidos por las autoridades aduaneras de sus respectivos países.
Además de simplificar los procedimientos, el REX también contribuye a fortalecer la transparencia y la trazabilidad en el comercio internacional. Al requerir que los exportadores emitan declaraciones de origen, se establece un sistema más claro y directo para la verificación de la procedencia de los productos.
Las naciones que pueden utilizar el sistema REX son todas aquellas que mantienen acuerdos bilaterales, unilaterales y multilaterales con la Unión Europea, los cuales se clasifican de la siguiente manera:
- Países mediterráneos
- MERCOSUR
- Países de la Comunidad Andina
- Países de África, Caribe y Pacífico (ACP)
- Balcanes
- Países de América Latina y Caribe
- Asia
- Asia Central
¿Quiénes pueden acceder a este sistema?
En principio, aquellas empresas que operan como exportadores y que envíen mercancías a la Unión Europea o a terceros países con acuerdos comerciales con la UE, pueden ser considerados como exportadores registrados.
Dentro de los mismos acuerdos comerciales, se reconoce la figura del exportador registrado y se establece el uso del sistema REX. Además, la categoría de exportadores registrados se extiende a aquellos establecidos en un Estado miembro de la Unión Europea que exportan productos originarios de esta región.
Finalmente, los reexpedidores de mercancías, establecidos en un país de la Unión Europea y que deben comunicar el origen de dichas mercancías, pueden ser registrados como reexpedidores. En este contexto, serán considerados reexpedidores registrados al reenviar productos de esta región a otras ubicaciones dentro del territorio aduanero de la Unión o a países como Noruega, Suiza o Turquía.
Estas distinciones se basan en los acuerdos comerciales que la Unión Europea mantiene con otros países, específicamente en lo que respecta a la acreditación del origen de las mercancías.
En este sentido, algunos países requieren que los exportadores obtengan una autorización para exportar (exportador autorizado), mientras que otros simplemente exigen que el exportador esté inscrito en un registro especial de exportadores (exportador registrado), como es el caso del sistema REX.
Es importante destacar que el hecho de estar registrado en este sistema no confiere la condición de exportador autorizado. Cada categoría tiene sus propias implicaciones y requisitos, siendo esencial comprender las distintas figuras en el contexto de los acuerdos comerciales internacionales.
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Ventajas del registro de exportadores
Como se ha visto, el sistema REX ofrece varias ventajas tanto para los exportadores como para el proceso global de comercio internacional, entre los que se destacan las siguientes:
- Simplificación de procesos. Este sistema simplifica significativamente el proceso de certificación de origen al permitir que los exportadores se registren y emitan declaraciones de origen por sí mismos. Lo anterior reduce la carga administrativa asociada con la obtención de certificados de autoridades gubernamentales, agilizando el flujo de productos en el comercio internacional.
- Autonomía para los exportadores. Al facilitar que los exportadores emitan sus propias declaraciones de origen, el REX otorga mayor autonomía a las empresas exportadoras, lo que les permite gestionar sus documentos de manera más eficiente, reduciendo la dependencia de procesos burocráticos y optimizando recursos.
- Eficiencia en el proceso de exportación. La eliminación de intermediarios en la certificación de origen contribuye a una mayor eficiencia en el proceso de exportación. Los exportadores registrados pueden realizar declaraciones de origen de manera más rápida y directa, lo que acelera la expedición de productos hacia su destino final.
- Reducción de costos. Al simplificar los procesos y eliminar la necesidad de certificados físicos emitidos por autoridades gubernamentales, el sistema REX puede ayudar a reducir los costos asociados con la certificación de origen.
- Mayor transparencia y trazabilidad. Este sistema requiere que los exportadores emitan declaraciones de origen, lo que contribuye a la transparencia en el comercio internacional. Lo anterior no solo facilita la verificación de la procedencia de los productos, sino que también fortalece la confianza entre las partes comerciales.
En conclusión, el Registro de Exportadores desempeña un papel crucial en la facilitación del comercio internacional, ya que, al simplificar los procesos y empoderar a los exportadores, el sistema REX contribuye no solo a la eficiencia comercial, sino también al desarrollo económico de los países en desarrollo que buscan acceder a los beneficios del comercio internacional.
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Fuentes: Logisber
