La avería gruesa es uno de los siniestros más costosos y catastróficos que existen en el medio marítimo, incluso también uno de los más tardados en resolverse, ya que puede tomar años la resolución de un siniestro como este.

De igual manera existe un poco de confusión en este tema ya que resulta complicado incluso para las aseguradoras y los involucrados en el tema declarar si se trata de una avería gruesa o no.

Sin embargo, las Reglas de York y Amberes la definen de la siguiente manera: “Existe un acto de avería gruesa cuando, y solamente cuando, se ha hecho o contraído, intencionada y razonablemente, cualquier sacrificio o gasto extraordinario para la seguridad común, con el objeto de preservar de un peligro las propiedades comprometidas en una aventura marítima común”.

Por el otra parte, el Código de Comercio, en su Artículo 812 la define como: “Serán averías gruesas o comunes, por regla general, todos los daños y gastos que se causen deliberadamente para salvar el buque, su cargamento, o ambas cosas a la vez, de un riesgo conocido y efectivo”.

Por lo tanto, como lo observamos en las anteriores definiciones, la avería gruesa sucede cuando el capitán del buque toma la decisión de sacrificar mercancía con el fin de salvaguardar la integridad del buque, su tripulación y el resto de la mercancía a bordo. Excluyendo de esta manera, cualquier otro tipo de accidente ocasionado durante el viaje de dicho buque provocado por situaciones extraordinarias dentro de la definición de avería gruesa.

¿Cómo se define o declara una avería gruesa?

No es extraño enterarnos de noticias en las que lamentablemente durante el trayecto de un buque, este se encuentra con dificultades durante su viaje, ya sea complicaciones climatológicas, tormentas, huracanes, sobrepeso o incluso hundimientos en donde pierde cierta cantidad de contenedores en el océano. Sin embargo, como ya vimos anteriormente, la avería gruesa no se define como un accidente durante el viaje en mar de los contenedores, sino que es más específico.

Una vez que sucede un accidente de este tipo es necesaria una investigación profunda sobre este, en donde para definir si se trata o no de una avería gruesa deben concurrir los siguientes elementos:

• Peligro común y la razonabilidad del acto.
• La voluntariedad.
• Autoría y formalismos.
• El sacrificio extraordinario.
• La salvación común.
• El resultado útil.

Actualmente uno de los casos más recientes que aún se encuentra en investigación es el accidente sucedido al buque ONE Apus, el cual perdió alrededor de 1,800 contenedores en el océano al enfrentarse a dificultades meteorológicas durante su trayecto de Yantian a Long Beach.

El buque arribó posteriormente en el puerto de Kobe para descargar el resto de los contenedores (algunos de ellos dañados) que se encontraban aún a bordo, maniobra que tardará al menos un mes en concluirse y que durante el despacho de ajuste se podrá determinar si este caso califica como avería gruesa o no.

Si te interesa saber más sobre este tema, te invitamos a visitar nuestro canal de YouTube en donde te contamos todo sobre ¿Qué sucedió con el buque ONE Apus? 

¿Qué sucede con las pérdidas ocurridas en consecuencia de esta avería?

Las pérdidas por avería gruesa suelen exceder los cientos de miles de dólares ya que representa la pérdida de la mercancía, los daños al buque, contenedores, etc. Todas estas pérdidas corresponden a ser cubiertas por obligación a todos los involucrados en el viaje, cubriendo una cuota proporcional del sacrificio causado por el acto del capitán.

Los dos artículos que encontramos en la legislación que regula esta materia, son el artículo 812 del Código de Comercio español que menciona ““A satisfacer el importe de las averías gruesas o comunes contribuirán todos los interesados en el buque y cargamento existente en el tiempo de concurrir la avería”. Y dentro de la Regla D de York y Amberes: “Cuando el acontecimiento que motivó el sacrificio o el gasto haya sido consecuencia de una falta cometida por una de las partes comprometidas en la aventura, subsistirá la obligación de contribuir; pero ello sin perjuicio de las acciones o medios de defensa que puedan afectar a dicha parte por tal falta”.

De esta manera, la única forma de ampararse del pago de dicha cuota en un caso de avería gruesa es contratando el seguro tu mercancía a través de un agente de seguros autorizado ante la Comisión Nacional de Seguros y Fianzas (CNSF) como lo es SafeLink México, quien te brinda dentro de su póliza una cobertura a todo riesgo de bodega a bodega protegiendo tu mercancía de avería gruesa.

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Fuentes: Derecho marítimo,TIBA Group.