Con el incremento de habitantes a nivel mundial, las ciudades se han consolidado como los principales núcleos de población, ya que, según un estudio del Banco Mundial, hoy en día el 55% de la población mundial (aproximadamente 4 mil 200 millones de personas) vive en una ciudad. Por esta razón, la logística urbana ha tomado una mayor relevancia en años recientes debido a que permite mantener abastecidas de productos de manera efectiva a estas zonas.

Gracias a su importancia para las ciudades, este tipo de logística evoluciona constantemente sus procesos, sistemas y estrategias con la finalidad de realizar envíos masivos más rápidamente. No obstante, también se enfrenta a una serie de desafíos que le impiden manejar la enorme demanda que exigen miles de personas diariamente.

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¿Qué es la logística urbana?

La logística urbana es un conjunto de actividades que tienen como objetivo gestionar la distribución de bienes y servicios dentro de las zonas urbanas. Es por esto que se centra en la planificación, organización y control de los flujos de mercancías que se producen en las ciudades, con el objetivo de asegurar la rapidez y la sostenibilidad de los procesos logísticos en las grandes urbes.

Este tipo de logística lleva a cabo las actividades que permiten el abastecimiento de productos, como la recepción, el almacenamiento, la preparación y la distribución de bienes y servicios. Por esta razón, se considera que es esencial para el correcto funcionamiento de las ciudades, ya que garantiza que los productos lleguen a los consumidores de manera eficiente y oportuna.

La principal causa por la que la logística urbana se ha vuelto tan importante en años recientes es debido a la aparición del comercio electrónico, cuyo incremento transformó la forma en la que se realizaban los envíos, llegando los consumidores a recibir su pedido en menos de 24 horas. Además, un estudio de la consultora Deloitte señala que más del 70% de los usuarios encuestados repiten compra si los procedimientos de entrega han resultado satisfactorios, por lo que también resulta una parte fundamental de la economía.

Es por esta razón es que se debe encontrar un equilibrio entre la eficiencia y la sostenibilidad en esta logística, ya que es imprescindible asegurar una economía fuerte, una calidad de vida sostenible para los ciudadanos y un abastecimiento correcto de productos.

Los retos a los que se enfrenta

Pese a su importancia en la cadena de suministro, la logística urbana enfrenta una serie de retos importantes debido a las características propias de las zonas urbanas, entre los que se que encuentran los siguientes:

• Congestión del tráfico. En las ciudades, el tráfico suele ser un problema importante, lo que puede afectar negativamente la eficiencia y rapidez de las entregas. Además, esta situación también puede aumentar los costos operativos de las empresas, ya que los vehículos de transporte deben utilizar más combustible y los conductores pueden perder más tiempo en los desplazamientos.
• Inseguridad. Este problema puede manifestarse de varias formas, como el robo de mercancías (que es la más común) y la vandalización de los vehículos. Estas amenazas pueden tener un impacto significativo en la eficiencia y la rentabilidad de las operaciones de logística urbana, así como en la seguridad de los trabajadores.
• Falta de espacio. En las zonas urbanas, el espacio para la recepción, almacenamiento y distribución de mercancías suele ser limitado, lo que puede dificultar la gestión de las entregas y aumentar los costos operativos.
• Sostenibilidad ambiental. Este es uno de los retos más grandes a los que se enfrenta la logística urbana, ya que puede tener un impacto significativo en el medio ambiente, especialmente en cuanto a la emisión de gases contaminantes y la generación de residuos. Las empresas que operan en las zonas urbanas deben buscar formas de reducir su impacto ambiental y mejorar la sostenibilidad de todos sus procesos logísticos.
• Cambios en los patrones de consumo. Dichos cambios pueden ser el aumento del comercio electrónico y la entrega de productos a domicilio y que generan nuevos desafíos logísticos. Es indispensable adaptarse a estos y encontrar formas de satisfacer las demandas de los consumidores de manera eficiente y más sostenible.

¿Cómo lograr una logística más eficaz?

Dentro de las estrategias que pueden presentarse para que la logística urbana sea más eficaz y sostenible, es necesario que se consideren acciones dentro y fuera de los almacenes, ya que esto permitirá que los envíos se realicen más rápidamente. Algunas de estas medidas son las siguientes:

• Acercamiento de la logística a los principales nudos de comunicación. Las empresas optan por situar sus centros logísticos y de distribución cerca de las grandes urbes para ofrecer entregas rápidas y eficaces. Algunas compañías disponen de centros de gestión de logística inversa para asegurar la devolución en el menor tiempo posible.
• Medidas de seguridad. Ante el incremento de los robos de mercancías en las zonas urbanas, muchas empresas instalan sistemas de vigilancia y alarmas en los vehículos de transporte, además de realizar sus entregas en horarios de menor riesgo. No obstante, estas medidas no son 100% eficaces, por lo que es preferible asegurar todas las mercancías a través de SafeLink Marine para protegerlas ante cualquier riesgo durante su trayecto nacional e internacional.
• Creación de centros de consolidación de cargas (UCC). Este tipo de centros logísticos optimizan el reparto de productos en las grandes urbes, ya que en este punto se encuentran las mercancías de uno o múltiples proveedores para distribuir los envíos según la ruta del transportista, según el cliente final, etc.
• Sistemas inteligentes de gestión del tráfico. Estos sistemas permiten optimizar el flujo de vehículos en las zonas urbanas, reducir la congestión del tráfico y mejorar la eficiencia de las entregas. Para esto, utilizan tecnologías como la monitorización del tráfico en tiempo real, los semáforos y los sistemas de información al conductor para gestionar el tráfico de manera más eficiente.
• Uso de vehículos eléctricos y bicicletas de carga. En la parte ecológica, los vehículos eléctricos y las bicicletas de carga son opciones sostenibles y eficientes para la entrega de productos en las zonas urbanas, ya que estos no emiten gases contaminantes y son ideales para distancias cortas.

En definitiva, es indispensable que las empresas conozcan más acerca de las medidas para mejorar la logística urbana de las grandes ciudades debido a que esto permitirá una distribución más efectiva de las mercancías y con un menor impacto al medio ambiente.

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Fuentes: CEUPE