Restricciones comerciales: sus principales afectaciones en la actualidad

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El proteccionismo es una política económica en la que el Estado interviene mediante la aplicación de restricciones comerciales a los bienes y servicios provenientes del extranjero con la finalidad de minimizar las importaciones. Esta fue una práctica fuertemente utilizada por las naciones más importantes a partir del siglo XV, ya que deseaban crear economías más autosuficientes y, a su vez, incrementar la competitividad de sus empresas locales e incentivar la predilección del consumidor por la producción de dichas compañías.

A partir de la caída de la Unión Soviética en 1991, el mundo comenzó a integrarse económicamente en la ya conocida globalización, por lo que el libre comercio pasó a ser la política económica más utilizada y hoy en día, la mayor parte de los países intercambian bienes y servicios de manera libre. No obstante, históricamente ha existido un patrón en el que las naciones adoptan medidas proteccionistas frente a las crisis mundiales, situación que también ocurrió durante la pandemia por COVID-19 y que trajo graves afectaciones económicas que aún persisten en la actualidad.

 

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¿Cuáles son los tipos de restricciones comerciales más comunes?

Existen varios tipos de restricciones comerciales que los gobiernos de ciertos países pueden imponer para regular su comercio internacional y así fortalecer a su economía. Primeramente destacan los aranceles, que son impuestos o tarifas que se aplican a los bienes importados o exportados y pueden ser ad valorem (un porcentaje del valor del bien) o específicos (una cantidad fija por unidad de medida).

Por otra parte, existen las restricciones no arancelarias que incluyen una variedad de medidas distintas a los aranceles, como requisitos de licencias, estándares técnicos, barreras fitosanitarias y normas de origen. Estas medidas a menudo buscan proteger la salud, la seguridad, el medio ambiente o los intereses económicos del país importador. Existen una variedad de medidas no arancelarias, entre las que se pueden destacar las siguientes:

  • Cuotas. Estas restricciones comerciales son límites establecidos en la cantidad de bienes que pueden importarse o exportarse en un determinado periodo y estas pueden ser cuotas voluntarias acordadas entre países.
  • Prohibición de importación. Hay ciertas mercancías cuyo comercio está prohibido por motivos de salud, orden público, seguridad, entre otras. Es por esto que se puede aplicar la prohibición a su importación para proteger el patrimonio cultural de un país.
  • Embargo. Un embargo implica la prohibición total del comercio con un país o región específica y puede ser impuesto por razones políticas, de seguridad nacional o en respuesta a violaciones de derechos humanos.

Además de las restricciones arancelarias y no arancelarias, también existen las barreras técnicas al comercio, las cuales incluyen regulaciones técnicas y estándares de calidad que los productos importados deben cumplir para ingresar a un país. Dichas regulaciones pueden ser necesarias para garantizar la seguridad de los consumidores, pero también pueden utilizarse como barreras comerciales no justificadas.

 

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Las afectaciones actuales de las restricciones

A raíz de la pandemia por COVID-19, se observaron diversas restricciones comerciales implementadas por varios países en un intento de proteger sus economías y abordar los desafíos causados por la crisis. Esto se hizo evidente sobre todo en las exportaciones de insumos médicos, pues muchas naciones impusieron medidas proteccionistas para evitar enviar este tipo de productos al extranjero y así asegurar un suministro adecuado de estos productos a nivel local, lo que llevó a una escasez y dificultades para otros países en la adquisición de los suministros necesarios.

Asimismo, los países fortalecieron los controles y las regulaciones sanitarias y fitosanitarias para garantizar la seguridad de los productos importados; sin embargo, estas medidas también eran utilizadas para restringir el comercio y proteger a los productores nacionales.

La imposición de estas restricciones comerciales trajo consigo una serie de consecuencias, de las cuales algunas todavía pueden observarse en la actualidad:

  • Disrupción de las cadenas de suministro. Las restricciones a las exportaciones y la imposición de barreras comerciales dificultaron el flujo de bienes y servicios a nivel global. Esto interrumpió las cadenas de suministro, especialmente en sectores como la salud y la industria manufacturera, lo que resultó en escasez de productos esenciales y retrasos en la producción.
  • Aumento de los costos para los consumidores. Las medidas proteccionistas, como los aranceles y las restricciones a las importaciones elevaron considerablemente los costos de los productos importados, lo que en la actualidad continúa impactando directamente a los consumidores debido a los precios más altos y a la menor disponibilidad de mercancías en el mercado.
  • Menor cooperación internacional. Las medidas proteccionistas comerciales han generado tensiones y conflictos entre los países, lo que ha llevado a un debilitamiento de la cooperación internacional y ha dificultado los esfuerzos conjuntos para abordar los desafíos de la pandemia y promover la recuperación económica global.
  • Riesgo de escalada de conflictos comerciales. Las medidas proteccionistas pueden desencadenar respuestas de represalia por parte de otros países, lo que puede llevar a una escalada de conflictos comerciales. Es así que se aumenta la incertidumbre económica y puede dañar aún más el comercio internacional y la estabilidad a nivel mundial.
  • Impacto en los países en desarrollo. Los países en desarrollo, que a menudo dependen de las exportaciones y de las cadenas de suministro internacionales, se ven especialmente afectados por las medidas proteccionistas, ya que estas medidas pueden dificultar su acceso a los mercados internacionales y obstaculizar su desarrollo económico.

 

Es así que la adopción de estas restricciones comerciales redujeron la oferta mundial abruptamente, lo que aumentó los precios de los productos y perjudicó a todos los países, sobre todo a los más frágiles. A pesar de que esta situación se restableció a lo largo de 2022, lo cierto es que evidenció que el proteccionismo comercial agrava las crisis mundiales y genera consecuencias letales para los países en desarrollo que aún pueden observarse en la actualidad.

 

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Fuente: CEPAL

 

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